La harina de sangre es un fertilizante orgánico para la etapa de vegetación de las plantas debido a su alto contenido de nitrógeno (14%), pero también aporta hierro y contiene aminoácidos L-Triptófano que colabora en el crecimiento y desarrollo de la raíz.
Utilizaremos una cucharada sopera cada 20 litros de sustrato o 1 cucharadita de té en 1 litro de agua sin cloro.
La harina de sangre es un fertilizante orgánico para la etapa de vegetación de las plantas debido a su alto contenido de nitrógeno (14%), pero también aporta hierro y contiene aminoácidos L-Triptófano que colabora en el crecimiento y desarrollo de la raíz.
Utilizaremos una cucharada sopera cada 20 litros de sustrato o 1 cucharadita de té en 1 litro de agua sin cloro.